Las acciones de Nvidia se estanca entre DeepSeek y unos resultados récord que no convencen

Los títulos del fabricante de microchips se han visto afectados por diferentes noticias consideradas negativas por los inversores

A pesar de su irregular marcha bursátil, los expertos siguen confiando en su potencial

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Edificio de Nvidia Corporation en Taipei, Taiwán.

REDACIÓN FINANZAS ABC

Sevilla
10/3/2025

Actualizado a las 22:32

Nvidia presentó a finales de febrero unos resultados récord correspondientes a 2024. Sus ingresos se dispararon un 114%, hasta los 130.497 millones de dólares (unos 125.000 millones de euros), mientras que sus beneficios escalaron hasta los 72.880 millones de dólares (unos 69.500 euros), un 145% más que en el ejercicio anterior. Sin embargo, la Bolsa apenas mostró euforia por sus cuentas, más bien al contrario. Las acciones de Nvidia repuntaron en torno a un 4% antes de que se desvelara su cuenta de resultados y cayeron más de un 8% una vez que el dato fue público.

El fabricante de semiconductores ha perdido este año el impulso que registró el ejercicio pasado. A lo largo de 2024, sus títulos se revalorizaron cerca de un 180%, al pasar del entorno de los 50 dólares por acción (47,7 euros) en enero a los 137 dólares (130,7 euros) en diciembre, si bien su cotización estuvo llena de altibajos durante esos 12 meses. En ese periodo, los títulos de Nvidia se beneficiaron del boom de la Inteligencia Artificial (IA) y de la expectación que generaban todos su proyectos entre los inversores, pero también se vieron afectados por las dudas sobre la sobrevaloración de los títulos, el escaso rédito de la inversión en IA y distintas investigaciones, tanto en China como en Estados Unidos, por monopolio.

¿Por qué caen sus acciones en 2025?

A pesar de todas esas turbulencias que afectaron a la compañía a partir de la segunda mitad del año, las acciones de Nvidia lograron sobreponerse a finales de 2024 y convertirse en una de las compañías favoritas de los inversores y analistas de cara a 2025, sobre todo por las expectativas que tenían puestas en el fabricante de chips. Esas esperanzas se truncaron poco después de que arrancase el año con la aparición de DeepSeek. La IA china puso en entredicho la tecnología estadounidense y demostró que se podía hacer lo mismo con menos presupuesto. Eso dio la razón a todas las voces críticas con las grandes cantidades de inversión en IA que se estaban desembolsando en Estados Unidos sin que las compañías, entre ellas Nvidia, sorprendieran con avances o proyectos impactantes.

Así, DeepSeek comenzó a mellar la ya maltrecha confianza de los inversores en Nvidia. El día que se presentó DeepSeek, a finales de enero, las acciones de Nvidia se hundieron cerca de un 17% en Wall Street, lo que llevó a la compañía de Jensen Huang a perder 600.000 millones de dólares (unos 572.400 millones de euros) en bolsa en una sola sesión. Los títulos de Nvidia cayeron por debajo del soporte de los 120 dólares (unos 115 euros), y quedaron en torno a los 118 dólares por acción (112 euros). La tendencia bajista se instaló unos días más y no pudo empezar la remontada hasta la primera semana de febrero. Aunque en la parte final del mes logró reconquistar la barrera de los 140 dólares (133,5 euros), su cotización duró poco en ese nivel y volvieron las caídas.

Desde el 20 de febrero hasta la primera semana de marzo, las acciones de Nvidia acumularon un desplome del 20%, hasta los 112 dólares (106 euros). El motivo detrás de este último descenso es que sus resultados no satisficieron las expectativas del mercado. Aunque sus cifras de 2024 fueron récord, los inversores esperaban mucho más de la compañía de Huang, y todo ello a pesar del buen tirón de de su chip Blackwell y de la alta demanda que está recibiendo, incluida de grandes compañías tecnológicas. También le ha afectado la guerra arancelaria desatada por la Administración Trump, que ha empezado a concretarse esta semana con México o Canadá

Por último, el mercado también ha castigado a Nvidia tras conocerse que el Gobierno de Singapur había informado de la detención de tres sospechosos por haber vendido chips de GPU (unidad de procesamiento gráfico) a China, a través de Malasia. Las investigaciones se centran, además, en conocer si Nvidia tiene conocimiento de ello.

¿Qué recomiendan los analistas?

Aunque las acciones de Nvidia se han dejado más de un 17% en lo que va de año, el consenso del mercado sigue confiando en esta compañía para tenerla en cartera. La tecnología y, en concreto la IA, es uno de los sectores con más potencial para este 2025, y a pesar de las dudas que pueda suscitar, la realidad es que la competencia china con DeepSeek afianza la importancia y las repercusiones que tendrá la IA en sí misma y en sus aplicaciones a otros campos.

Además, tampoco hay que olvidar que Nvidia, en su análisis general, sigue mostrando fortaleza. Sus resultados están en cifras récord y la compañía sigue bien posicionada dentro de un sector en auge, además de contar entre su clientela con las empresas tecnológicas más punteras. Por esta razón, los analistas le otorgan la recomendación de compra fuerte y le auguran un importante recorrido en el parqué para este año. Su precio objetivo, en un escenario neutral, se sitúa en los 175,68 dólares (167,51 euros), por lo que tiene un potencial alcista del 54,22% desde los niveles actuales. En un escenario más optimista, los títulos de Nvidia podrían conquistar los 235,92 dólares (casi 225 euros), con lo que su potencial sería del 107,02%. Incluso en un escenario más negativo, las acciones del fabricante de semiconductores tendrían margen para alcanzar su precio objetivo, que se sitúa en este caso en los 135 dólares (128,7 euros), con un potencial del 18,51%.